martes, 18 de diciembre de 2012

noches blancas


Lunes, 7 de la mañana, ese día decidí llegar tarde a la ofi justamente para cortar con el luneró, pero no. Había sido mi madre tenía otros planes para mi. Entonces suena mi cel y me saluda la vieja toda acelerada.

Me pregunta: “Mi amor que tenes planeado para este año nuevo?!” (obviamente no tenía nada). Llena de ilusión le digo “Nada mami, QUE HAY???!!!”. Juro que en ese momento pensé que me iba a decir algo así como “Vamos a la playa hija, aprovechando el feriado largo”. No sé por que pensé eso, me traicionó un brote de mente positiva que ando cultivando. PERO NO. A cambio de eso me dice: “Ah bueno, entonces te cuento para reservar la mesa en el club”. BUE.

De más está decir que mi día ya no empezó tan bien como planeé.

No es que quiera pasarme de dramática pero en serio es un bajón tener que pasar la fiesta más festiva del año rodeada de conocidos/desconocidos todos glamorosos y en pose. En realidad eso es lo de menos, no me importa tanto quién esté a nuestro alrededor, pero sí me estresa que hay que nio estar a la altura de las circunstancias. Esto es, sacar del baúl toda la paquetería y los tacos mas altos que tenes, bien peinadita y maquilladita porque al fin y al cabo es una fiesta en que la gente se produce.

Problema número 1: desde hace 20 kilos abandoné completamente la tradición del vestido blanco en año nuevo. Para vestir esto y estar a gusto o sos ultra cuerona o realmente sufrís de complejo de quinceañera. Ninguna de las dos opciones aplican a mi caso.

Problema number 2: maquillaje y peinado?! soy maquilladora y sé que año nuevo es la fiesta en la que más se factura, increíble es, pero dioooossss, nadie calcula que en serio hace 40 grados a la noche y la cara se te derrite y el pelo se te frizza.

Problema 3: tanto glamour exige unos buenos tacos, y para esta servidora, tacos y alcohol no son mejores amigos, ya van más de diez años nuevos que amanezco con moretones extraños.
Ya sé, soy una amargada.

Pero mi idea de fiesta ahora mismo es una conservadora gigante, un playlist muy variado, amigos y amanecer diciendo pavadas.
Ahora solo queda ponerle la mejor onda a la situación y bueno, lo único que pudo mejorar mi fatídico lunes de diciembre fue llamar a mi hermana y comentarle la decisión de madre. Por suerte ella piensa casi casi igual que yo y al menos somos dos empirevaizadas por la misma razón.

FELIZ INICIO DE 2013!!!

Pd: por experiencia, si van a hacerse estudios médicos después de las fiestas, esperen que pase aunque sea una semanita. Este año cometí el horror de hacérmelos el primer día hábil después de año nuevo y mi doctor casi me interna al ver los resultados.

Simbiosis


El proceso de adaptación a las costumbres alimenticias de una persona con la que empezás a convivir es medio complicado al principio.
Si recién le conocés a alguien es un clásico que no quieras ponerte a chanchear en su cara desde el día uno, recién después de agarrar un poquito de confianza te entregas a tu acostumbrado karuvai.

Si te gusta la personas, aún peor. Por eso nunca es buen plan tener primeras citas en locales gastronómicos aparte de acordarte de mantener buena postura y amable sonrisa tenés que recitar mantras de relajación para no tirarte sobre la canastita de panes y las respectivas mantecas. Que no piense desde el vamos que sos ansiosa y angurrienta. Cuando uno es gordillo es inevitable pensar en estas cosas, o no sé si soy yo nomás que pienso demasiado, pero el secreto está en hallar el punto intermedio, a la hora de agarrar el menú pues no podés elegir solo una ensalada mixta con soda si tu cuerpo delata que sos mas bien adepta a la parrillada completa con chinchulín. Entonces, qué hacer? Es así de complicado señores.

Estás en la delgada línea de quedar como una golosa de la pesada o una mentirosa.

Por suerte esto es solo el principio, al fin y al cabo, si la persona no llega a inspirarte confianza después de un par de salidas, el problema del qué elegir del menú es secundario.
Los tipos en ese sentido tienen mas concesiones, se supone que luego que comen mas que una. Pero Oh desgracia! no siempre es así entonces ya es cuestión de elegir el camino de a) mandar todo a la mierda y mientras el le baja una Caesar Salad vos te entregas a la fritura o b) adaptarte y tomar el buen ejemplo, que mal no te va a venir.

En mi caso pasé por todo, desde el adicto a la comida chatarra, que me llevó al acabose, el que me quería cambiar los hábitos a toda costa insistiendo para que coma como pajarito como él y el “vida sana” preocupado por sí mismo pero que no rompía las bolas. De estos tres ejemplos, imposible definir cual es mejor o peor. Supongo que peor es el que te quiere cambiar a la fuerza, siempre. Boludo, si tanto no te gusto na dejame, chau. Pero el extremo de la autodestrucción a base de MegaCombos tampoco es bueno.

Supongo que el mejor resultado de la ecuación es cuando encontras nomás ese equilibrio de confianza en el que sin que tu adversario te diga nadita nadita decidas sola a mejorar ese aspecto de tu vida.

Y es que no debería existir incomodidad que dure cien años.

Lady Gorda?


Ni Gaga que desde que se lanzó no hace mas que repartir un mensaje de tolerancia absoluta y de aceptación de nosotros mismos con el “Born this way” se salva de las críticas por su peso, y ni Gaga se salva de tener que dar explicaciones por tener kilos de mas.
Imagínense que esta chica después de haber soportado polémicas por su condición sexual, sus adicciones, su credo, su cordura... tuvo que tomarse el tiempo para aclarar que así como cualquiera de nosotros está mas gorda (11 kilos) porque anduvo comiendo bastante pizza y pasta! :O
Lady Gaga admitió que como muchisisisimas personas sufrió demasiado por su peso, pasando por etapas de bulimia y anorexia y admitió finalmente que a su novio actual le gusta mas la versión gostosa de su cuerpo. Inclusive compartió fotos actuales de ella en ropa interior, tapando la boca a todos los que especularon con sus oscilaciones de peso.
Hasta cuando va a ser necesario que las figuras tengan que salir a aclarar estos temas? Cuando vamos a acostumbrarnos a ver mas allá? Pareciera ser que las abiertas mentes del mundo están preparadas para revoluciones mentales de todo tipo pero todavía no toleran de ninguna manera un par de rollitos al agacharse.
Discriminar no es solamente tratar mal al que es “diferente”, discriminar es también pensar que el otro no puede hacer tal o tal cosa por no encuadrarse en los parámetros de nuestras cuadraditas mentes.

Pd: al escribir esto, estamos a poquito de su show en PY y ya no puedo pensar en otra cosa que en estar ahí!

50

Una sensación super rara es salir o ir a algún lugar y que nadie te reconozca. Las mismas personas de siempre, muchos de ellos tus amigos, pero a simple vista nadie se da cuenta que sos vos.
Me contó una amiga que eso le anda pasando muy seguido, es mas, yo misma doy fe de que está irreconocible! Después de cruzarmela dos o tres veces recién (con cara de sorpresa) pude saludarle.
Esta amiga adelgazó nada menos que 50 kilos! Si, 50, básicamente se quitó una modelo de pasarela de encima.
Se quedó por la mitad, y está muy bonita.
Después de “ponderarle” un buen rato le pregunte exactamente TODO sobre como lo logró. En realidad, no existen secretos, para ella fue exactamente un año de esfuerzo y sacrificios, y según mi amiga ya ni siente tanto esfuerzo ni tanto sacrificio, se acostumbró totalmente.
Lo que me sorprendió no fue realmente el cambio físico sino algunos aspectos de su nueva vida que según ella no son tan fantásticos como cualquiera pensaría, por ejemplo:
- Me dijo que si antes “no tenía que ponerse” por gordita, ahora menos! que no está para nada acostumbrada a su nuevo cuerpo y le parece que todo le queda mal, que siempre soñaba con el momento en el que le entren tranquilamente los talles de las tiendas, pero que ahora que el cierre cierra el espejo es su peor enemigo y siente que nada le va bien.
- Que no tuvo mas levante por estar mas flaca y que inclusive el tipo que siempre le gustó se fue alejando mas del ella después del cambio, que en lo que a hombres se refiere está todo mal ya que toda esta revolución la pone bien tímida y perdió un poco de esa actitud avasalladora de cuando estaba en su peso máximo.
- Que definitivamente se siente de maravillas en cuanto a salud se refiere pero que las cicatrices psicológicas de tantos años de gordita son dificilísimas de borrar, la inseguridad y la incomodidad dentro de su propio cuerpo siguen, y también una rara percepción de como la miran los demás.
Ver a esta persona tan bien, dan ganas, en definitiva dan ganas de empezar y hasta con cierta convicción del si se puede. Y también agradecí su honestidad, que me haya contado que está difícil inclusive acostumbrarse a lo que una siempre soñó, prueba de que el “estar bien” es un estado integral y que el amor propio depende de una mezcla de muuuuchos factores y no esta para nada condicionado a unos centímetros mas o menos de piel.

Pichicata


Pastillearse es jodido, siempre le tuve una especie de miedito,pero a veces mi desesperación le ganó a mi razón entonces admito que probé de todo un poco.
Lo peor de las pastillas, además de los densísimos efectos colaterales para la salud y el terrorífico efecto rebote, es que te enloquecen mal mientras las consumís.
Hay algunas que te depriiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiimen y te dan sueñisimo todo el día y bajas y bajas de peso pero en vez de ponerte contenta estás con una cara de “me corto las venas”.
Otras, peores para mi gusto, te aceleran tanto que directamente no podes quedarte sentada. Lavas, planchas, fregas, escurris, vas al gym, volves y seguis aceleradísima, todo sin comer y llega un momento en el que sentis que estás a dos minutos de tener un patatus, y la dejas.
Finalmente, estan las que no te deprimen ni aceleran pero de nada sirve mantener tu personalidad porque directamente no podes salir del baño, esas son las menos densas pero OUCH que dolor de panza y cola y ademas no es muy socialmente aceptado el salir corriendo a matar baños todo el tiempo.
En realidad, ninguna vale la pena, porque excepto que tengas demasiado aguante o realmente no te importe andar enloquecida por la vida, sus efectos no compensan lo que se sufre.
Escribo esto a modo de ayuda memoria para recordar lo mal que se puede llegar a pasar, porque confieso que la vez pasada me entró una especie de tentación de bajarle unas pastillitas por unas semanitas, asi apuraba procesos.
Mejor no. Viva la vida sana.

miércoles, 17 de octubre de 2012

Ganale por la panza

No sé si solamente forma parte de la cultura latinoamericana pero desde que tengo memoria escucho frases como que “el corazón de los hombres está conectado con su estomago”.
Yo personalmente nunca le di mucha bola, mas bien me dedicaba a esperar que alguien tome la iniciativa de preparar algo rico y por supuesto después comer yo.
Pero después de horas de observación y reflexión (si, estoy muy al pedo) me di cuenta que verdaderamente cocinarle a alguien es un lindísimo acto de amor.
No solamente para conseguirte un chongo sino que el cocinero o la cocinera del grupo es siempre la persona mas festejada del grupo.
Mi mejor amiga por ejemplo es famosa por montarte improvisadamente unas suculentas meriendas de la nada, solo necesitás avisarle que tenés hambre (aunque ahora la muy perrita nos tiene medio abandonados porque su novio es un gordito muy demandante), otro amigo suele encargarse de las cenas y sea lo que sea que tenga ganas de preparar le sale riquísimo y se convierte en el ídolo de la noche.
Mi mamá prepara los mejores... los mejores todo en realidad, desde caldos hasta carnes, pastas, postres, etc. etc. etc. y la mamá de mi mamá ni que decir.
Cocinar es acercarse a las personas que querés, agasajarlas y hacerlas sentir bien.
Entonces, yo que soy una consagradísima inútil culinaria me propuse a intentar aprender aunque sea un poquito mas.
Así, cuando aparezcan las personas especiales de mi vida voy a poder ofrecer algo mas que mixto y toddy licuado.

lunes, 15 de octubre de 2012

Top Ten del Laburante

Yendo de aquí para allá me encontré con una nueva herramienta para excusar la obtención de muchos kilos.
Se trata de una lista elaborada por una consultora de empleos muy famosa y en la que se llegó a la conclusión de cuales son las carreras o profesiones que mas exponen a las personas a subir de peso. Por sus características  estas actividades se destacan por llevarnos a una vida sedentaria o por el contrario a sufrir bastante ansiedad, lo cual en primer lugar nos hace comer o picar cuanta boludez se nos cruce en el camino y a la vez no estamos justamente quemando calorías frente a una compu.

De las diez que cito a continuación en una especie de countdown, yo ya me dedique a tres, así que la próxima vez que mi vieja me llame la atención por mi gordura, voy a poner mi mejor cara de clase obrera sufrida... y gorda!

10. Profesionales de la tecnología de la información.
9. Marketing y RRPP
8. Servicios de seguridad (policías, bomberos, etc.)
7. Médicos
6. Asistentes administrativos
5. Artistas, disenhadores, arquitectos.
4. Profesores.
3. Trabajadores sociales.
2. Abogados.
1. Agentes de viajes.

Están en la lista?
A mí, lo que mas me llamó la atención es el número 8 de los security, no se por que pero en mi cabeza solo caben bomberos sexys ;)

Fuente: www.careerbuilder.com

miércoles, 26 de septiembre de 2012

gordita profesional

Cuando uno es gordo se tiene que tragar que por el simple hecho de ser gordo le desacrediten.

Descubriste la cura al cáncer, pero sos ese doctor GORDITO que descubrió la cura.

O sea, cuando la gente te señala no dice, mirá un poco, es ese, el genio que esta allá en la esquina, sino que dice, mirá un poco, es ese el gordito de anteojos que está ahí parado.

En mi caso, pocas veces fueron las que no me identificaban como “la gordita, la rubia gordita, la gordita de lentes, etc. etc.” es como que al tener kilos de más facilitás la descripción para que la gente te ubique pronto en el mapa.

Todo este preámbulo solamente para contarles que la otra vez tuve que ir a hacer un trabajo en una sucursal del lugar donde laburo, eso involucraba un par de días en otra ofi y con gente con quienes normalmente solo trato por teléfono.

Llegué y todo era buena onda, hasta que entre el blabla típico de una oficina me entero que la secretaria del jefe se burlo de mí.

Me enteré que dijo algo así como: “Ahí viene la miss peggy de la otra ofi, la chanchita de los Muppets”, y dijo eso como para ser “mala” gua’u conmigo.

Primero me piché, me enojé porque dije, puta, no estamos más en la secundaria para estos comentarios, y admito que me dolió un chiqui.

Después pensé en dos cosas y me tranquilicé: una, yo tampoco soy ninguna santa y suelo lanzar esos comentarios cizañeros y dos, bueno, si eso es todo lo que pudo decir de mí no es nada al lado de lo que yo pienso de una persona tan recurso’i como ella, que por algo seguramente a sus cuarenta y largos años lo máximo que puede aspirar es a leer la Cosmo en su escritorio de secre y burlarse de las gorditas profesionales como yo.

Touche!

casorio

Mañana se casa una de mis mejores amigas.
Tengo muuuchas amigas y entre todas, ésta es con la que menos coincido en cada pensamiento, siempre chocamos, siempre! ella siempre ideal y yo tan terrenal. Sin embargo, siempre tuvimos ese pacto tácito de darnos mutuamente la primicia de lo más importante que nos va pasando a medida que pasa el tiempo. Entre esas primicias estuvo por ejemplo la de un día cualquiera entresemana en el que ella, escondidita desde un baño, me llama y me dice: Loca! Me caso!

Esta vez no voy a hablar de las 14 fallidas dietas que hice para llegar churra a su casamiento, pero si les voy a contar del papel medio protagónico que tuvo la comida a lo largo de nuestra amistad (al fin y al cabo esto es un diario sobre eso, no?).

Se puede por ejemplo hacer una línea de tiempo y recordar que a eso de los 13 nos reuníamos después del cole en su casa y esperábamos que su madre salga para ir corriendo a la coreana de la esquina y rayar, no pucho ni alcohol ni nada de esas cosas que suelen dar curiosidad a esa edad, sino INGREDIENTES PARA HACER PIZZA! Y así tarde a tarde nos escapábamos y la merienda era un festín de gula.

En esa época mi amiga era también gordita hasta que un día, previa puteada porque la libreta de la despensa vino casi un millón, mi amiga empezó a hacer dieta y se quedo flaquita flaquita y ya no subió nunca más (perra). El resto de la adolescencia ella, por haber bajado tanto, se erigió en una especie de gurú del adelgazamiento para todo el grupete y nos daba recetas jodidas y dolorosas entre las que primordialmente figuraba echar tés en el terere y darle con todo hasta asegurarnos de que ya nunca más saldríamos del baño. Desastre. Ya de grande, en los viajes de chicas era la que más sabia cocinar siempre, y eso (entre otras cualidades protectoras) le convirtieron en la mamá de todas, así le decimos de cariño. Y de grande también, mi amiga tuvo varias eras gastronómicas, que ya no dependían tanto de las amigas sino de los amores, pasando por un novio de asado diario (si! dia-rio) y por otro vegetariano, hasta llegar a la etapa omnívora en la que encontró el amor para siempre.

Mi amiga, la que se casa, no se sabe muy bien con qué platillo nos va a aparecer mañana en la fiesta pero de algo si podemos tener certeza y es que en esta línea de tiempo, al leer esto, ya va a estar en su propio y vivieron felices y comieron perdices. Salud!

jueves, 6 de septiembre de 2012

la reivindicación de los gordos

Que la tele en general es un freak show eso ya sabemos, pero me anda llamando la atención que hoy en día no solamente la mujer barbuda o el hombre mas enano del mundo (chulina Nelson) son fenómenos mediáticos.

Pareciera que hoy día basta con ser gordo, o ser gordo adelgazado, o ser un gordo fan de alguien, o ser simplemente gordo para ganarte un espacio que de inclusivo y anti discriminatorio no tiene nada.

Muchísimos minutos del prime time dedicados a burlarse de personajes cuya peculiaridad mas marcada es simplemente tener kilos de mas, bueno, y un poco de simpatía, pero que gordo no es simpático?

Tal es el caso del Bailando de Tinelli que lanza a su pista a personajes como una gorda del programa de Cuestión de Peso, cuyo merito no es justamente el saber bailar, sino haber bajado como 80 kilos; o al gordo fan de Wanda Nara, que se las pasaba llorando y siendo patetico y así se ganaba una semanita mas en el show, o sin ir mas lejos; la Mole Moli que si bien se destacaba por haber sido boxeador, llegó a la final justamente por ser una Mole que bailando solo causaba un poquito de verguenza ajena y un poquito de ternura.

Pero esto no es tercermundismo latinoamericano. En USA triunfa Glee reivindicando a los losers, entre los que encontramos al nerd de siempre, la teenager embarazada, al gay, al inválido, a la cheerleader hueca y claaaaro a las gordas que al final se quedan con los mejores galanes. Tanto esta marcada la gordura como especie de “impedimento” que inclusive en el programa Project Glee que es una especie de semillero de la famosísima serie, encontré a una participante que además de tener cierto talento de voz, alega que su sueño es demostrar a las gorditas que SI SE PUEDE! que por mas gorda que seas podes llegar lejos.

Claro que se puede llegar lejos, si al final todos somos personas, con razón y espíritu. Pero me confunde el mensaje. Llegan lejos pero sus personajes son objetos de burla, en todos los casos. La rareza de sus papeles radican en que “Oooooh! mirá como la gorda se queda con el Mariscal de Campo”.

Y eso señores, no es la vida real. No lo hace mas aceptable en la sociedad, no lo hacen mas llevadero en el día a día.

Muestran una realidad super fácil y light, siendo que en el fondo, por mas amor propio que nos tengamos, no es un paseo convivir con decenas de kilos de mas. Nadie duda de la inteligencia o simpatía o talento musical de un gordo, pero no es en un abrir y cerrar de Big Mac que todos los tipos se van a enamorar de vos, o que el Director de alguna obra te va a elegir de protagonista o que alguna marca te va a pagar para que seas su imagen.

Lastimosamente a veces el intento de parecer “inclusivos” solamente marca mas fuerte las diferencias. Y lastimosamente, la mayoría de nosotros consumimos esos programas mientras nos comemos unos snacks.

un poco + de lo mismo


La imagen es esta: yo en la estera o yo en la maquina que simula una escalera. Sudor y lágrimas.

A mi frente, los personajes de siempre:
- el ultra stressado que jura que generando endorfinas una hora al día recupera todo lo perdido en anhos de workaholiquismo.
- la vieja mega tuneada con cara de velocidad de tanto estire quirúrgico que vestida en top y calzas super ajustadas deja ñembotavy que el instructor le toque un poquito.
- los pendejos que licuado y pichicata mediante intentan llegar pesokitas al viaje de fin de curso a alguna playa du brasiu.
- la flaca desorden alimenticio que derrama toda su furia sobre la bici fija.

Y claro, yo. Yo que cuento los segundos para que acabe la sesión y cuento regresivamente los años que me faltan seguir yendo a ese maldito lugar para perder los kilos que quiero y nunca mas volverlo a pisar.

lunes, 16 de julio de 2012

Menú light

Como ahora me toca comer en un comedor con todos mis compañeros de laburo, estoy siendo testigo de un fenómeno que hasta a mi me supera.
La empresa soporta un plan nutricional para los empleados que tienen ganas de cuidar su alimentación, entonces todos los días uno puede pedir su menú light que consiste básicamente en una porción de carne o pollo, abundante ensalada y una pequeña porción de arroz. Aparte, una ensalada de frutas riquísima. Por otro lado, están las opciones del día, una enorme variedad de comiditas bien calóricas, sobretodo ahora que hace frio.
Saben que hace la gente??? Solicitan correctamente el menú light, pero durante el tiempo que transcurre entre que le armen el plato y se los sirvan, van a la isla del buffet “normal” y se sirven porciones de importante tamaño de cosas como frituras, pastas, y todo lo que NO es light. Entonces, la fritanga fungiría de plato de entrada y el pollito grille como principal.
Notable. Rarísimo. Seguiré observando y ampliaremos.

Todo pasado fue mejor

Como eterna gordita la moda siempre fue una pasión pero a la vez algo que no siempre estuvo a mi alcance.
Mi primer recuerdo de no poder ponerme lo que estaba de moda fue cuando tenía 12 años y el acontecimiento era la fiesta de fin de año del grado. En esa época, tooodas las compañeras nos poníamos más o menos de acuerdo para ver que nos pondríamos, cero estilo propio, cero personalidad, lo normal a esa edad.
“El look” de esa temporada eran los vestidos aldeanos bien cortitos, medias bucaneras y unos suecos con tacotes de madera. Obviamente las bucaneras no eran una buena idea para mis piernas, que más que estilizadas quedaban medio cortaditas. No era para tanto, cuando eso ni celulitis tenia, pero no me quedaba TAN bien como a las flaquitas del grado. Y fue así como siendo una nena, porque yo fui bien nena hasta los 14 más o menos, ya era consciente de que no me podía poner lo que veía en las revistas o ni eso, no podía ponerme lo que todas las chicas se ponían. Mi mama me retaba porque yo lloriqueaba por no poder vestirme “a la moda”, y a lo mejor porque le desesperaba me decía: “Si vas a ser gorda, tenes que ser una gorda con actitud, sino no comas” y yo, ni dieta ni actitud seguía lloriqueando.
Durante los últimos años del cole pude zafar, viajar, ir a las fiestas, usar la malla, shortcitos, jardineras cortiiiisimas y también micro minis. Igual yo siempre sentí que algo no estaba perfecto como yo quería. No le voy a echar la culpa a nada ni nadie, me sentía así y punto.
Hoy veo las fotos o mi ropa de esa etapa y me da una rabia, era la mitad de lo que soy ahora, pero yo nunca me sentía bien. Siempre estaba GORDA. Es un poco injusto como a veces la evolución de nuestra cabeza no combina con la de nuestro cuerpo, y es muy loco como la pelotudez e inseguridad de la juventud/adolescencia te juega una mala pasada.
No quiero pensar que hoy estoy mejor que mañana y que mañana me voy a arrepentir de haberme sentido mal hoy, se entiende? Así que espero que ahora, que ya estoy preparada para aceptarme más (evolución mental) mi cuerpo se ponga las pilas y vuelva a lo que era tiempo atrás (involución corporal).

martes, 10 de julio de 2012

autoabastecimiento

Vivir sola no es tan fácil, sobretodo cuando no sabés hacer nada, sobretodo cuando no sabés cocinar y sobretodo cuando tu principal meta en la vida es bajar de peso.
Al principio me engañé y dije: ahora sí que es el momento, ya no va a haber toda la comida que había en casa, no tengo plata porque gasté todo en la mudanza así que no voy a poder comprar nada hecho, y no sé crear nada rico con un limón y medio frasco de mermelada (contenido de mi heladera).
TODO BOLA!
Sucede que de hambre uno nunca va a morir. Por más que afuera hagan dos grados bajo cero, que el local chatarroso más cercano esté a vaaarios kilómetros de mi casa, y que en mi billetera literalmente quede solamente el dólar de la suerte, una siempre se las arregla para seguir morfando, y por ende, no bajando de peso.
Es así que visitando amigos aprovechás cualquier meriendita o picada para retirarte bien lleno, y entonces pasás de ser una simple gordita a una gordita rata. Las idas al super también sn jodidas, con 10mil tenés que alimentarte, y pasa que con 10mil alcanza justo para la trincha de pan, el jamon y hasta un chocolatito de postre.
Ya había dicho que lo light es muy caro, no? Bueno, lo light es un presupuesto bastante excluyente.
Mis planes de inanición resultaron un fracaso, como ven, toda excusa es buena para el gordo, si antes no bajaba por heladera llena, hoy no bajo por exactamente lo contrario!

miércoles, 13 de junio de 2012

maldito enfermero


El otro día fui a hacerme un chequeo médico. Odioso, a quién le gusta someterse a esas pruebas? Pero necesario.
Me desperté un sábado a las 6 de la mañana, habiendo ayunado un viernes y me dirigí al Sanatorio. Imaginen la fórmula SÁBADO – 6 AM – AYUNO – AGUJAS. El pirevai era indescriptible.
Pasé por varias salitas, laboratorio, sangre, pis, rayos X. Hasta ese punto todas las personas que me atendieron se portaron más que amables. Eso es bueno ya que se aguarda muchísimo en las duras sillas de la sala de espera para que te toque el turno. El próximo estudio que debía realizarme era el electrocardiograma, y la rutina consistía en pesarme, medir la altura y después recién conectarse a la maquinita.
El enfermero, cuando llamó mi turno ya tenía luego una cara de cachiai. Yo con pirevai in crescendo (eran las 10.30 hs, había llegado a las 7 puntualmente). Al entrar a la salita me saluda con un: “Pero que cara de dormida que tenés che” simpático guaú. Ahí le pregunto qué tenía que hacer y me dice: “Vamos a pesarte primero”. De mala gana me saco los zapatos y me subo a la balanza, sin ninguna señal ni ánimo de “chistear” con él. Me pesa, y me pregunta: - “Cuánto solés pesar?” - “TANTO” le contesto y ahí dice mirando los números de la balanza: “Jijiji no soy el más pesado aquí por lo visto…”. PLOP. Agrega: “Va con onda, con humor, nadie elige su peso”. MORÍ.
Pregunto: qué clase de profesional lo que sos para bajarle esos comentarios?
Yo pio le digo a mis clientes (soy abogada): “Uy parece que alguien se va a ir a Tacumbú y no soy yo” “Ay! parece que no soy la más quebrada de la sala jijiji”… NO! Porque estoy trabajando carajo y respeto a la gente. Me imagino que el tipo este habrá visto gente de todo tipo y de todos los tamaños y pesos como para hacerse del simpático o sorprenderse a mis costas.
No es que yo sea extra sensible.
Pero no me espero del banquero que me diga que estoy pobre riéndose o de la depiladora que se ría porque soy un mono. No! Acudo justamente a esta gente porque SE SUPONE son profesionales y tienen su ética laboral y de servicio que no permite hacer sentir incómodo al cliente/paciente lo que sea.
Entonces, no habiéndole dado pie a este tipo para que se haga el simpaticón, pregunto: POR QUÉ NO SE AGUANTÓ? Por mí que piense lo que quiera, pero el no tiene derecho a boludear así con un paciente. Loco, estudiaste, es-tu-dias-te años para hacer lo que estás haciendo, y se supone que algo has de saber por eso estás en el mejor centro médico de la ciudad, así que UBICATE.
Lo peor del caso es que el test requería que me saque la remera para conectar los cablecitos de la máquina. Pregunto de nuevo: si a mí me hizo un comentario por gorda, le hace algún comentario análogo a las tetonas? “Ay que grandes esos melones” jijiji” O a las flaquitas? “Ay! Parece que se te va a salir todo tu hueso jijiji”. Espero de corazón que no sea así.


Bonus: Esto me hizo acordar a un video de CUALCA que tiene más o menos algo que ver y es sobre los servicios médicos y sus desubicaciones. Les paso el link porque soy re buena onda y definitivamente no soy la más pesada de la sala:http://vimeo.com/42409237

lunes, 11 de junio de 2012

Cambios


La gente se hace de la diplomática, pero obvio NO ES.
Pasa que me mudo, cambio de mi trabajo, mando todo 
a la mierda y me voy lejos.
Es un buen cambio para mi, profesional, de plata, de aires 
de todo.
Pero qué es lo único que me resalta la parentela? 


“Te va a hacer de bien el cambio, seguro que bajás de peso y todo”.


PUTA.
A nadie le calienta que sos super capo en tu profesión y que 
estás creciendo.
A nadie le calienta que por fin vas a desalojar tu domicilio abandonando la estadística del treintañero malcriado.
A la gente solo le calienta que cualquier cambio radical te 
cambie el chip y mágicamente bajes de peso.
Eso… y por supuesto que consigas chongo. 


No vaya a ser que te quedes solterona.

miércoles, 23 de mayo de 2012

esa era mi amiga?


No hace mucho me escribe una amiga de hace tieeempo. Fue mi primera mejor amiga. Nos hicimos compinches en tercer grado del colegio y éramos inseparables (de esas insoportables luego porque todo hacíamos juntas), éramos familia. Después con el tiempo y la boludez adolescente yo me enojé con ella y nunca más hablamos, bueno, sí hablamos, pero nunca más fue como antes. Yo era ñembo malita en el colegio y ella, bueno, la verdad que mi egocentrismo no me permitió fijarme mucho en qué anduvo ella durante esos años, imagino que lidiando con sus hormonas como yo. El punto es que me escribió para hacer algo, salir a tomar algo, ponernos al día, lo que sea. La salida no se dio, los horarios no se ponen de acuerdo.
Esa aparición me hizo acordar de miles de pendejadas que hacíamos juntas, nos divertíamos y sufríamos por cosas tan insignificantes. Pasaron los años, muuuuuchos años, más de diez años y a veces la vida hace que nos encontremos de forma casual, siempre que nos vemos nos hacemos fiesta y siempre planeamos reuniones que nunca cumplimos. Parece que cuando te ponés vieja te ponés sentimental sobretodo con cosas como amistades de infancia. Realmente pegaría concretar alguna vez las charlas/chismes que nos debemos.
Anoche, como todo domingo paria, Facebook, ruedita del mouse corriendo, viendo cuánto más vida tiene la gente que yo, me topé con una foto del rostro de mi amiga. El retrato era precioso, lo había tomado uno de mis fotógrafos favoritos de acá. Entonces le dí click y empecé a chusmear el álbum. Casi me desmayé cuando vi el resto de las fotos, la chica, mi amiga, mi compañera de colegio, o sea mi contempo, salía en cada foto mejor que en la anterior, hasta que llegué a unas en las que posa en ropa interior y ahí ya quise tirar la computadora, previa llamada a todas mis amigas para que compartan mi sentimiento de hechaputez al lado de alguien tan diosa a nuestra edad.
Puede ser sana la envidia? O es vergüenza esto que se siente? Estamos en esa edad en la que ya se nota quién está bien deteriorada y quien se conserva super bien? Ya llegamos a esa edad? Por qué nadie me avisó?!
Mentira, hubo señales que pasamos por alto. Me acuerdo que terminamos el colegio y nos fuimos de viaje de fin de año a la playa. No sé si era mi mejor momento de esbeltez pero ciertamente era la mitad de lo que soy ahora. Pero haciendo memoria, me viene la imagen de mi amiga y los cuadraditos en su panza, una cosa de locos el cuerazo que se mandaba. Imagínense que en esa época la situación de las demás al lado de ella ya era semi-desastrosa, Y ESO QUE TENÍAMOS 17 AÑOS! Debo haberme preguntado en ese momento por qué miércoles no seguí siendo su amiga o por lo menos su compañera de gimnasio. Será que a estas alturas iba a estar así?! Será? Será? 

no sos la misma


Llega cierta edad en la que ya no sos la de antes.
Farrear y enganchar el laburo definitivamente no es una opción. Es más, farrear fuerte sábado luego ya no es tan buena idea porque una resaca puede llegar a durar tranquilamente más de 24 horas.
No, no sos la misma. Comer comida chatarra te cae más pesado que antes. Bailar dos horas de seguido ponen de huelga a tus rodillas al día siguiente. Quedarte viendo una serie hasta las 2 am anulan tu capacidad de concentración al día siguiente.
Entonces, te ponés a evaluar tu rutina y te das cuenta que por más que desde los quince estuviste mamando consejos de salud y belleza, nunca pero NUNCA hiciste caso a ninguno. O bueno, a lo mejor sí hiciste caso. Te compraste cremas hidratantes, antiestrías, cremas mágicas que utilizaste exactamente durante dos semanas. Empezaste el gym, pagaste una cuota altísima y fuiste tres veces. Te volviste vegetariana, eeeeh, solo durante un almuerzo de un día. Entonces “cumpliste” pero no cumpliste un carajo porque en realidad ni siquiera a medias cumpliste.
Esto no solo pasa por la gordura. Pasa por mil aspectos. La piel, el pelo, la agilidad, la flexibilidad, el aguante, el arranque, el abrir los ojos para despertarse y empezar el día, el conciliar el sueño por las noches.
Todo va adquiriendo una maña nueva. Nada sale automáticamente como antes. Ya no sos la misma.

jueves, 12 de abril de 2012

mal cambio

La siguiente situación es muy perra y le pasa a mucha gente.
Pasa que, una tiene un novio, le quiere a su novio, le ama.
Empieza el festejo (sí, así digo yo) y todos felices. Estás más linda que nunca porque querés sorprender a los ojitos del príncipe y también porque durante esas primeras semanas todo es salidas y actividades.
Es la etapa en la que todavía no hay relajo. A lo mejor hasta seguís una dietita para estar cada vez mejor.
Siguiente etapa, la comodidad, el chico ya no tiene vergüenza de invadir tu sofá y sobre todo tu cocina, súbitamente perdió las ganas de salir, entresemana se cena delivery (casi siempre chatarroso) y fin de semana asado o pizza + cervezas con los amigos en alguna casa, así onda tranqui nomás. Vos decís adiós a las épocas de peluquería y super producción, jeans y championcitos nomás si total no se sale.
La segunda etapa no tarda en hacerse evidente, solo es cuestión de mirar la panza del muchacho y el botoncito de tu jean desprendido camuflayadamente. El amor engorda.
De repente, no hay medida exacta de tiempo para esto ni motivos uniformes, el romance termina: rompen, terminan, chau.
En un estado total de sorpresa no calculaste que podías volver al mercado y esos kilos engordados siguen ahí. Te deprimís, te recomponés otra vez, pero jamás empezás la dieta :O
Tus amigas y sobre todo tu mamá te rompen las pelotas para que te pongas linda, espléndida y que salgas de nuevo a la caza de algo. Primero no les das bola. Después se te cruza por la mente que quizá tengan razón. TE MATÁS DE HAMBRE, TE MATÁS EN EL GIMNASIO, TE HACÉS ELECTROSHOCK, RADIACIÓN, RAYO LÁSER, lo que esté de moda en el momento y finalmente te ponés presentable.
Te cruzás un día con tu ex a quien tanto le querías y ves que abrazada a el está una tipa no solamente igual o más gorda de lo que estabas, sino que también FEA.
No conseguiste nada, ninguna solicitud de matrimonio como habían garantizado madre y amigas, pero sos una diosa.
Existe alguna lógica para explicar esto?

Hablando de fotos

Un amigo viendo fotos en la compu. Da la vuelta el monitor y me dice enfáticamente: "Che, boluda, mirá qué flaca estabas acá!!!".
A lo que respondo: "Imbécil! Esa foto es de hace menos de un año! Qué tan hecha mierda puedo llegar a estar en tan poco tiempo?!"
Mi amigo elige el silencio, da la vuelta el monitor y sigue mirando fotos.

jueves, 29 de marzo de 2012

foto, foto

Cuando estás esplendido QUERÉS luego salir en la foto, no solo posás cada vez que alguien levanta una cámara sino que comprás luego una y lo que es peor, llevás a todos lados, hasta al más improvisado asaducho y rompés las pelotas para que todos se junten para inmortalizar el momento. También están los plagas que quieren quitar “fotos espontáneas” todo el tiempor, entonces jusssto cuando estabas dándole un mordisco a tu hamburguesa te enceguece su flash y al minuto ya ves tu ángulo menos favorecedor en una de esas malditas redes sociales.

Pero bueno, este espacio no solo se erige como descargo puteador sino que pretende dejar un legado social, así que, a continuación, para usted señora que suda frío cada vez que se asoma alguien con una cámara, le paso mis tips para no salir tan desastre en las fotos:

- Vestirse de oscuro: efectos especiales, ya hablamos de esto, la oscuridad achica, lo claro agranda y marca!

- Si la foto es entre dos o estás en el extremo de un grupo de gente, ponerse medio de coté: pero ojo, una leve inclinación nomás tiene que ser, no totalmente de costado porque ahí se nota la prominencia de la panza si la hay. Sería algo así como un giro de 30 grados.

- Si es foto-fútbol (algunos parados, otros arrodillados o acuclillados): ubicarse siempre en el grupo de los parados, una cuclilla mal planeada puede ser terrible para la que quiere disismular muslos.

- Buena postura!: funciona de verdad. Levantar mentón, chupar panza, levantar un poco el pecho (no onda himno) y relajar brazos resta 2 kilos por ahí (algo es algo).

- Si es entre todas las amis (foto grupal): no ubicarse al lado de la más flaca, se va a notar la diferencia, busquen a las más rellenitas, colóquense al lado y digan WHISKY.

- Sean felices: sonrían, la cara de enojada hincha los cachetes

- Payasear: esa es una receta que no solo funciona para casos de disimulación de grasas sino que sale muy bien para disimular borracheras. Poné cara de loca, cruzá la mirada, poné cara de beso, abrí tu boca grande, lo que sea, entonces lo que llama la atención es la supuesta demencia.

- Lo más efectivo: cómprense una cámara y sean ustedes los fotógrafos rompebolas, total, el que saca nunca sale J

Ahora que pienso mejor, no le den bola a nada de esto. Relajense nomás y busquen un lindo cursito de fotoshop.

jueves, 8 de marzo de 2012

rotos

La otra vez tuve una experiencia terrible.
Tengo un jefe super aceleradísimo y me pidió que le acompañe en una de esas jornadas de trabajo que consisten en ir de aquí para allá y hacer miles de cosas en tiempo récord. Iba con el señor en su auto, él manejaba y yo al lado ayudándole con montañas de papeles y bajándome a ciertos lugares por a o b motivo.
Subía y bajaba del auto y en una de las subidas CRICHHHHHHHHHH! un ruidito a desgarro. Mamá! qué fue eso!? fue lo primero que me vino a la cabeza y me quedé quietita sentadita en el asiento. Por supuesto que a los cinco minutos tuve que volver a bajarme del auto. Estábamos en pleno centro al mediodía, con un tráfico infernal y el calor que ya todos conocemos. Respiré hondo y sin identificar todavía qué fue lo que originó el ruido caminé. Caminé dos pasos y ya sentí el airecito sobre mi piel. Exactamente debajo de mi cola. Sí, el CRICHH ese era el sonido de mi pantalón rompiéndose, el sonido de la incorporación de aproximadamente 10 centímetros de un aire acondicionado a mi prenda, el sonido... el sonido de la vergüenza! Reventé mi ropa!
No solamente tuve que terminar mi recorrido con el trasero al aire, sino que no sabía cómo le iba a decir a mi jefe: "Che, pará na un rato que rompí mi pantalón y necesito coser o cambiarme o huir del país".
No encontré la manera de decirle, entonces tragando dignidad terminé mis tareas y apenas pude fui volando al local más cercano a comprarme uno nuevo.
En algún punto y gracias a mi mente que no sale de negación, me autoconvencí de que el pantalón se rompió por estar viejo y ajado. Ni se me cruzó que era porque pude haber engordado. Entonces, entré a la tienda y ágilmente agarré un par de pantalones del mismo modelo y de mismo talle y me fui directo a la caja para pagar nomás ya.
Confiadísima estaba que me iba a quedar perfecto lo que compré. Era lo mismo que uso hace tiempo!
Ya en la caja, se me prendió la lamparita y dije: "Me voy a cambiar nomás ya así dejo de pasearme con el culo al aire". Fui al vestidor y de ahí ya no quise salir nunca más cuando al intentar prender el botoncito y el cierre me percaté que no llegaban pero ni con calzador. Respiré hondo una vez más e intenté tragar todo lo posible la panza, no hubo caso, no me entró. Pensé hasta en acostarme para prenderme, pero tampoco iba a caber acostada en el vestidor y había serios riesgos de romper un segundo pantalón en el mismo día, y eso mi corazón ya no iba a resistir.
Pobre ilusa! Pensaste que seguías teniendo el mismo talle? Me decía el espejo... y el pantalón.
Bien sudadita, que es como quedé después de el esfuerzo, fui a llamarle a la vendedora y con la mirada al piso le pedí el siguiente talle, y de paso le pedí que ya me traiga dos. Era hora de renovar mi stock.

viernes, 2 de marzo de 2012

impulsivo

Leer esto en tonada de enigmático: No puedo contar quién pero un compañero de La Fábrica decidió empezar la dieta y en el término de dos días llevó a cabo los siguientes actos:

Día Uno: compró TODO EL SUPER para preparar un mega asado, chorizo, mandioca, pan, carne, chancho, sopa paraguaya, etc. etc. Nos invitó a todos, comimos hasta reventar, en pleno miércoles de cenizas, y todo porque él "al día siguiente" empezaba la dieta.

Día Dos: compró de nuevo TODO EL SUPER pero esta vez se concentró en las góndolas light. Llenó la heladera de la ofi de pollo deshuesado, yoghurt, frutas. La despensa de granola, galletitas sin azúcar, cereales, cerealitas, nambré. Parecía la cocina de Gwyneth Paltrow de tan orgánico que ya era todo. Lo peor, se enojó muchísimo con una del staff porque osó a comer UNA galletita :P

Así somos, así apostamos: al todo o nada. Esperamos atentos los resultados... y qué miedo cuando venga el extracto de la cuenta del super!


domingo, 5 de febrero de 2012

breath out!

Ay! me puse muy política de repente.
Van o votar por mí?
Dieta para salir en los afiches ya!

la gran pretty woman

Hace poquito más de un mes se armó una mini polemiquita a nivel local en las redes sociales con relación a una queja de una compradora gordita por el trato que recibió en una tienda de diseño nacional.
La cosa fue más o menos así: la chica fue a una de las tiendas de la marca y recibió un trato muy desagradable de parte de la vendedora, quien supuestamente le miraba de forma despectiva porque era gorda, sumado a esto no pudo encontrar ninguna prenda que le quede bien, bueh, ninguna prenda que le entre siquiera porque los talles le resultaron muy pequeños. Entonces la chica subió un comentario puteador a su facebook, hablando de la mala atención que rozaba la discriminación.
Ok, en una micro sociedad como la nuestra estas pavadas pueden pasar desapercibidas como pueden generar un gran kilombo. Sobretodo si los involucrados son personas de equis status social, entonces genera más ruido. Personalmente, no conozco ni soy amiga de los involucrados pero presté mucha atención a cómo se desarrollaban las reacciones porque realmente el "asquerosismo" de las vendedoras ya me tocó miiiil veces.
El comentario de la afectada recibió muuuchos subcomentarios de la gente y cada uno contaba su experiencia. Todo hasta que uno de los propietarios del local se disculpó y no seguí más la historia desde ese ángulo. Pensé que ahí terminó.
Paralelamente, en el twitter (todo siempre a nivel Asunción del Paraguay), donde últimamente es asqueroso como reina la agresividad, pude leer comentarios de la diseñadora y de varias de sus amigas, algunas colegas suyas, otras del mundillo de la moda y otros los opinólogos profesionales de siempre haciendo comentarios en contra de la queja de la clienta enojada. Comentarios que en resumen lanzaban el mensaje: "si sos gorda jodete y por favor ni aspires a ponerte nuestras super fantásticas creaciones (sic)". Todos ofendidos porque una consumidora, amparada de todos los derechos que todos tenemos los consumidores de cualquier producto, hizo algo que el 99% de nosotros nunca hacemos que es: quejarnos con nombre y apellido y mandar al carajo públicamente.
Y es con las reacciones que te das cuenta lo LEJOS que estamos de vivir en una sociedad de respeto y tolerancia. Paréntesis: les conté que la mayoría de las que bajaron la caña a la clienta no son justamente esbeltas? ah no? bueno, NO SON, es más son de mi equipo.
Es impresionante lo fuerte que es el caretismo, tanto que por hacernos de los high fashion ponemos en riesgo nuestro negocio, con comentarios que se asemejan al "si no te gusta, andate". Qué manera de tratar a un cliente es ese? A la vendedora no le culpo porque a lo mejor es un trabajo pasajero más nomás para ella, pero lo que me llama la atención es la filosofía de los dueños o gerentes de la empresa: en serio no les calienta que sus clientes estén descontentos? en serio no les calienta que muchas personas como yo por ejemplo y toooooooodos mis amigos hayamos sido testigos silenciosos de lo que pasó? en serio no les calienta perder plata? No afirmo nada, me pregunto nomás todas estas cosas porque no encuentro la lógica. Después, y por favor, sin herir susceptibilidades ni delicados egos: amigos diseñadores, nadie les pide que diseñen para gente gorda (que tanto asco les da), hagan lo que quieran, o en sus palabras: creen lo que sus inspiraciones les ordenen, pero recuerden que acá genios de la moda todavía no surgieron, sino no dudo que ya estarían leeeeejos de nuestra aldea, y hagan un mea culpa sobre lo "malitos" que son y también discriminativos, la tolerancia y el amor propio ya no solamente son valores, sino que hasta se los utiliza como estrategia de marketing.
Y finalmente, si yo tengo mi billetera llena de dinero para gastar en lo que se me antoje pero peso 100 kilos, me vas a impedir que me vaya y compre TODA TU BOUTIQUE solo porque no diseñás para gente como yo? solo porque tus ropas van dirigidas a "otras figuras"? No creo. Qué calienta si compro todas las ropitas para ponerle a mis Barbies, o si compro y después salgo embutida a la calle, si la idea es ganar plata? O en serio piensan que Karl Lagerfeld se preocupa si es que sus clientas pesan más de 60 kilos?
Nadie pretende decirle a nadie lo que tiene que hacer, pero qué lejos estamos de encarar el negocio de la moda con responsabilidad y respeto. Y finalmente, si sos gorda, no por bajar la caña a otra gorda adelgazás, besis!

souvenir

Me fui de vacaciones con mi madre y llegó el momento de comprar los regalitos para mis hermanos.
Al nene mil cosas obviamente, creo que ya había contado una vez que el es el hijo favorito (cultura machista 100%) y después tocaba elegir cositas para mi hermana.
Desde hace un tiempito mi hermana viene bajando de peso y bajó bastante, convengamos que no corre riesgo de desaparecer pero se nota el cambio.
Entonces la vieja aprovechaba todas y cada una de las oportunidades en las tiendas de ropitas para recalcar: 1. lo obesa que estoy y, 2. lo flaca que está mi hermana. Tienda que entrábamos y yo elegía algo, tienda en la que ella decía: "no, tiene que ser un talle más chico, acordate que tu hermana es mucho más flaca que vos". En una de esas me hizo probar unos vestiditos que me quedaban bastante mal, no porque no me entraban sino porque parecía una nena boba con esa onda floreada, le cuento a mi mamá y me dice: "Está bien que te quede mal, porque eso quiere decir que a tu hermana le va a quedar super bien".
Rompebola es. Pero esos comentarios son el pan de cada día últimamente y la verdad que ni me hubiera acordado de éstos si no era porque cuando mi hermana se probaba cada prenda mandaba al diablo porque todo le quedaba bien ajustadito (creo que también entendió que se trataba de una clara indirecta manipuladora para que ni se le ocurra abandonar su huelga de hambre).
Como broche de oro y completando el pack de "recuerdos de las vacaciones" mi vieja le entrega un pack con saquitos de té "Adelgafruta"... Y los alfajores? pss, ni en otra vida!

viernes, 3 de febrero de 2012

sincerarse

es sublime el momento cuando respirás hondo, mirás al cielo y te das cuenta que una vez más, tu amiga se quedó con el chico buena onda y churro, con quien tenías TODO en común, SOLO porque es más flaca que vos. fantástico.
se empieza la dieta. (una vez más).

miércoles, 11 de enero de 2012

nos maquillamos

faltaba comida en este blog.
entonces hicimos unas cuantas modificaciones :)
gracias cojonudos!

jueves, 5 de enero de 2012

oportunidad

Enero es un mes demasiado especial, es la resaca de una pequeña temporada de abusos.
Abuso de comidas, de bebidas, de reencuentros, de trasnochadas entresemana, de nostalgias, de regalos, de tráfico, de alka seltzer, de tererés con extra yuyos, de calor y de abrazos también.
Para colmo, en el medio de todos esos abusos la cabeza trabaja sin parar balanceando todo lo que pudimos y lo que no pudimos lograr durante los doce meses.
Yo sé que algunos quieren restarle importancia al cambio de un año diciendo que es un cambio de hoja calendario, todo bola. Inevitable es pensar: "este año no renuncié todavía a mi laburo, este año no me enamoré, este año en vez de bajar subí, este año no planté un árbol, no escribí un libro, este año todavía no soy millonario...". No solamente nuestra cabeza nos traiciona pensando en todas esas cosas sino que todo alrededor nos lleva a esa inevitable sensación clasificadora de hechos en Logrados y No logrados.
Entonces enero es un mes especial. Especial para darnos un respiro de esa autopresión y esa presión social que sufrimos y se acrecienta a medida que pasa diciembre. Especial para desajustarnos las corbatas y bajarnos de los tacos. Especial para relajarse y sentirse lindos nomás. Lindos porque sí, porque somos lindos, y no porque nos quedan divinos esos microshortcitos.
Así que gente, que se jodan los que piensan que continúa nomás la historia después de un cambio de fecha. Para mí, es la oportunidad perfecta para empezar (o volver a empezar y hacer todo mejor :)
BUEN AÑO! y que brinden con muchas caipis!

miércoles, 4 de enero de 2012

"LA" fórmula

Y con ustedeeeeeees...

LA FÓRMULA!

(anorexia + flacura) x (chongo + plata) = FELICIDAD

Einstein las pelotas, mi mamá es una genia. UFFFFFFFFFF!

voluntad

La voluntad o fuerza de voluntad o esas ganas que te hacen hacer cosas, para mí, y cuando se trata de dietas tiene precio, a seguir*:

G. 2.000.000 x mes: en esos lugares que te ponen electropatchs no sé qué cuánto y que de alguna manera te obligan a quitarte fotos del antes y después para luego publicarlas en página 3 del diario dominical de mayor tirada.

G. 1.200.000 x mes: en la franquicia de clínica de adelgazamiento de moda a la que van todos los gordos más top y salen maravillados con un programa de dieta, comiditas en mini potecitos, gym y charlas de autoayuda como si fuera que acaban de descubrir la mismísima rueda.

G. 140.000 x semana: en la clínica de un nutricionista que te pesa cada semana y te mide las grasitas con una especie de tenaza fría, lo cual no sé por qué, aterroriza.

Es así, para mí la voluntad para adelgazar, empieza con el adelgazamiento de mis bolsillos. Y sí, este es un post lleno de resentimiento… es que ando de pobre…


*costos aproximados obtenidos en charlas informales con amigos, carezco de seriedad investigativa con relación a este tema.



motivación

Por qué lo que una no se puede programar (tic tic tic) en su cabecita y hacer las cosas hasta lograr un objetivo.
Mejor dicho, por qué lo que una no se puede programar (tic tic tic) en su cabecita y hacer dieta hasta lograr estar flaca.
O mejor dicho aún, por qué lo que una no se puede programar (tic tic tic) en su cabecita y simplemente no hacer algo (comer) hasta desaparecer.
El proceso para programarme y hacer algo al respecto de mi gordura (léase dieta + gym) me da sueño, me aburre, hasta que degenero.
La operación empieza con la búsqueda de motivación, a ver, motivación, motivaciónnn: 1. poder vestir esos shortcitos tan chuscos que se usan en verano... naaaaaaaah, ya estoy vieja. 2. estar sana... naaah hay drogas. 3. estar divain (qué fea palabra) para el casamiento de menganita... pffff, me voy de negro. 4. no escuchar más el quebranto de mi madre... interesante... y así... hasta que el proceso de búsqueda de motivación termina en dos posibles salidas:
a) una acumulación de todas las posibles motivaciones que nos obligan desesperadamente a iniciar una dieta tan loca y extrema que degeneramos a las 18:25 horas del día 1 o;
b) un excesivo desinterés en cualquiera de las motivaciones señaladas que hacen que sigamos nuestra hermosa vida sin hacer nada al respecto.
Da asquito, pero es así. Besis!